Incluir en el aula a un niño autista con nivel 3 de apoyo puede parecer un gran desafío, pero con estrategias bien enfocadas, se puede lograr que participe y aprenda dentro de sus posibilidades. La clave está en adaptar el entorno y el material de aprendizaje a su forma de procesar la información, que suele ser más visual y concreta. Aquí te dejo algunas pautas fundamentales.
1. Todo en imágenes y vídeos: el lenguaje visual es su mejor aliado
Un niño autista con alto nivel de apoyo no suele procesar bien la información verbal, por lo que explicaciones largas o instrucciones habladas pueden perderse completamente. Para facilitar su aprendizaje, convierte todo el contenido en imágenes, pictogramas o vídeos.
✅ Usa pictogramas para representar cada paso de una tarea o actividad.
✅ Apoya las explicaciones con vídeos cortos y concretos en lugar de largas descripciones orales.
✅ Utiliza secuencias de imágenes para mostrar procedimientos o rutinas.
✅ Si es posible, elabora material manipulativo que pueda tocar y explorar.
💡 Ejemplo: Si estás enseñando los animales, en lugar de describirlos, usa imágenes reales, sonidos grabados o vídeos breves con movimiento
2. Rutina visual y estructura clara
Los niños autistas necesitan saber qué va a pasar y en qué orden para sentirse seguros y participar mejor.
🎯 Crea un horario visual con imágenes de cada actividad del día.
🎯 Anticipa los cambios con pictogramas o señales visuales.
🎯 Marca la transición entre actividades con temporizadores o colores.
3. Ambiente sensorial adaptado: menos distracción, más concentración
Muchos niños autistas nivel 3 se sobrecargan fácilmente con ruidos, luces o estímulos en exceso, lo que puede bloquear su aprendizaje.
🔹 Proporciónale un espacio tranquilo donde pueda regularse.
🔹 Usa auriculares con cancelación de ruido si hay demasiados sonidos en el aula.
🔹 Evita luces brillantes o parpadeantes que puedan alterarle.
4. Evaluación sin presión y adaptada a sus capacidades
No todos los niños pueden demostrar lo que han aprendido de la misma forma. Permítele responder con imágenes, elegir entre opciones o señalar en pictogramas en lugar de escribir o hablar.
✅ Ejemplo: Si estás evaluando colores, en lugar de pedirle que diga “rojo”, deja que te lo señale en una tarjeta o en una imagen.
5. Trabajo en equipo: docentes, terapeutas y familia
No tienes que hacerlo solo. Coordina con los especialistas que le atienden (PT, AL, terapeuta ocupacional) y con su familia para entender qué estrategias le funcionan mejor y mantener coherencia entre casa y escuela.
¡Un aula más visual es un aula más inclusiva!
Si adaptas el material a imágenes y vídeos, no solo ayudarás al niño autista, sino que también beneficiarás a otros alumnos con diferentes estilos de aprendizaje.
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📌 ¿Tienes en el aula un niño autista nivel 3? ¿Qué estrategias te han funcionado mejor? Cuéntamelo en los comentarios y no olvides darle like y Suscribirte si te ha sido útil este contenido. ¡Nos leemos en el próximo post!
Susana Ariza
Coach especializada en Neurodiversidad
“Vivir el Autismo”
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